Es curioso como todo parece suceder por algo (por qué? Ya no lo sé, pero es lo que menos importa).
Quizá un cúmulo de casualidades: una equivocación de escaleras, esa parada de metro, ese vagón, a esa hora, ...esa equivocación, esas horas de espera, esos nervios aún presentes y todo para algo que ni siquieres sabes lo que es.
Quizá lo curioso es aventurarse a la aventura. El "ver a ver qué pasa" siempre me resultó atrayente. Pero ultimamente me puede el pensar y el preguntarme qué cúmulo de casualidades/paradojas/coyunturas/oportunidades me conducen en cada acto, cada situación, cada circunstancia.
¿Por qué estoy ahora en Berlín? ¿Por qué estudio en Segovia? ¿Por qué tengo este blog? ¿Por qué estoy escuchando esta música? ¿Por qué me duele la espalda?
Para contestar cada pregunta podría dar una simple respuesta. Mas esta vendría precedida de una serie de acontecimientos, personas o momentos que lo habrían condicionado antes. Y estos a su vez por otros tantos de los que habría dependido.
¿Casualidad? ¿Destino? Me parecen términos demasiado ambiguos. Me gusta más decir que todo pasa por alguna razón, a veces inadvertida. O quizás que (tirando un poco de Amelie) "Las oportunidades pasan deprisa, hay que cogerlas sin dudar".
Y pensando ahora echo un montón de menos mi mayot (el dar un par de fouttes a petición de Lucas me abrió el apetito dancísitco), tengo ganas de ver Amelie y también de bajar en ascensor desde el tejado dándole a todos los botones. Ah! También el quedar para tomar café, aunque yo nunca los tome.
Es todo muy curioso. Solo digo que la próxima vez que penseis algo así como "qué hago yo , aquí y ahora, haciendo esto?" pareis de pensar y simplemente os dejeis llevar. Si estais ahí en ese momento por algo será.
Cierto: las casualidades no existen, el destino tampoco, sólo la causalidad y las oportunidades. Aprovechar cada segundo.
ResponderEliminarPor cierto, yo tampoco tomaba café, el primero fue en Berlín, en el Café Bilderbuch, cerca de la escuela, un sitio genial; ahora los tomo porque me recuerdan a Berlín, pero no en casa.
Desde las teclas una chica que cree en el destino: todo pasa por algo, siempre, tu escoges tu propio camino pero condicionado siempre por algo... jeje
ResponderEliminarRayadas de esas mias! :)
Suelo pensar que debe existir una fuerza oculta maligna o benigna segun la ocasio, que es la artifice de todas las casualidades....
ResponderEliminar*fouettés.
ResponderEliminarme alegro que a ti te salgan.
madre mia maria..... q filosofica te veo.... :)
ResponderEliminarya de vuelta a segovia?